Confundida, Kylie respondió: “¿Por qué debería dejarte en casa, Kendall? No voy a conducir por la ciudad para llevarte a casa”.
Corey luego sugirió que pidieran otro automóvil para llevar a Kendall directamente a casa. De alguna manera, esta recomendación agravó la situación.
Mientras hablaba por teléfono con Kourtney, Kendall estalló, “Corey, no voy a subirme a un maldito SUV al azar yo solo”.
Mientras continuaban los gritos entre las hermanas, Kylie espetó: “Nadie prometió llevarte a casa. ¿Por qué iba yo a prometer que te llevaría a la colina?”
En este punto, Kim llamó a seguridad y exigió que “vayan a buscar a Kendall”.
Khloe elaboró aún más en un confesionario: “Solo estamos escuchando gritos agudos, ni siquiera podemos entender qué está pasando, y suena realmente loco”.