¿Qué hace que una experiencia de cliente sea feliz y memorable? Pregunte a un puñado de datos demográficos diferentes y es probable que obtenga una increíble variedad de respuestas diversas.
Sin embargo, generalmente se acepta que un buen servicio al cliente cumple las siguientes casillas:
Grandes habilidades de comunicación
Una sonrisa amistosa y algunas bromas divertidas pueden alegrar el día de un cliente y poner un resorte en su paso. Los seres humanos son tribales y bastante leales por naturaleza. Si un cliente disfruta de la excelente comunicación que recibe en un establecimiento, seguirá regresando por más.
Sin embargo, “grandes habilidades de comunicación” a veces pueden significar saber cuándo no hablar. Si un cliente está de camino al trabajo o en medio de un día difícil, es posible que escuchar lo que el barista desayunó no sea exactamente lo que está buscando. Teniendo grandes habilidades de comunicación significa sintonizar con las necesidades del cliente.
Conocimiento del producto
Este es un grande. Ya sea en un supermercado, un carrito de café o un restaurante con servicio de plata, no hay nada más frustrante para los clientes que hacer preguntas aparentemente simples que no pueden responderse.
Programe reuniones periódicas con su personal para ponerlos al día con cualquier cambio de producto. No hay nada más impresionante que un camarero que conoce el menú de principio a fin, además puede recomendar complementar platos o bebidas desde un lugar de conocimiento.
Paciencia y resolución de problemas
La paciencia es un componente realmente importante de un buen servicio al cliente. Habrá momentos en que las cosas se estropeen o salgan mal inesperadamente. Capacite a su personal (ya usted mismo) en soluciones alternativas, lidiando con las quejas y estando tranquilo como el pepino proverbial bajo presión.
Eficiencia
Este último punto es posiblemente el más importante. El mundo en el que vivimos se siente cada vez más ajetreado … así que a nadie le gusta que lo hagan esperar. Una de las cosas clave que puede ofrecer es una eficiencia bien planificada.
Su dotación de personal es clave: asegúrese de que todos sus empleados sepan qué áreas cubren y cuáles son sus responsabilidades principales.
Más allá de todo eso, considere esto: ¿alguna vez tuvo una comida deliciosa y luego tuvo que esperar media hora para pagar la cuenta? No importa cuán deliciosa sea la comida, este tipo de experiencia puede dejar un sabor amargo. Asegúrese de que su sistemas de pago son tan hábiles como el servicio. Sus sistemas de punto de venta (POS) son clave para este proceso, es decir, los aparatos y el software que tiene instalados.
Afortunadamente, hay sistemas de punto de venta para hostelería que se adaptan a las necesidades de esta industria. Utilice características especiales como la capacidad de dividir la factura o realizar un seguimiento del inventario para mejorar su eficiencia general e impresionar a los clientes para que regresen.
Si su servicio al cliente y su eficiencia están marcando las casillas anteriores, estará en el camino correcto hacia el éxito.